- diciembre 1, 2022
Moda: usan materiales reciclados como base de prendas de exportación
Alejandra Gougy se especializa en aprovechar desechos y objetos en desuso para confeccionar sweaters, sacos, tapados, chalecos, bufandas, pantalones y vestidos. Es una referente de la “ecomoda” y logró reunir a 30 diseñadores de todo el país en la Asociación Moda Sostenible Argentina que ella misma fundó.
Su historia se remonta a su abuelo paterno y a su padre, que fueron pioneros en el cultivo del algodón. Ella pasaba sus vacaciones, junto con sus cinco hermanos, en el campo, siendo testigo del recorrido de la producción y de la entrega de toda su familia.
“Mi abuelo consideraba que el trabajo era la base de todo. Me crié con ese concepto de vida”, cuenta Gougy.
Sebastiana, su abuela materna, siciliana, también fue clave en su crianza: además de transmitirle el amor por lo artesanal, le enseñó a tejer y fue a ella a quien vio reciclar.
Su primera marca fue Hacienda. Se asoció con una amiga y después se quedó trabajando sola. “Hacíamos prendas en muselina, de línea retro y romántica a la vez. Luego creé Herencia, que armé con mi ex marido, el papá de Clara, mi única hija. Ante la necesidad, me rearmé empecé de nuevo pero con indumentaria corporativa. Llegué a confeccionar 70 mil unidades para empresas”, afirma.
Con el tiempo, se topó con los descartes de medias de nylon y ahí nació Cosecha Vintage. La marca, que ya tiene 15 años, nació en el 2007 y hoy madre e hija están al frente de la firma. “Soy pionera en la práctica del upcycling, que es generar prendas nuevas a partir de otras ya existentes para darles una nueva vida útil a los materiales que, si no fuera por esa búsqueda, quedarían en desuso”, explica.
La firma, un referente de la sostenibilidad local, lleva adelante la campaña “De los pies al corazón” junto con la actriz Elena Roger.
La nueva gran meta llegó cuando pudo crear la fundación de la Asociación Moda Sostenible Argentina (Amsoar) en torno a la cual reunió a más de 30 diseñadores de todo el país. Está pensada como una red de contención para marcas, emprendedores, artesanos, productores, proveedores y la comunidad en general.
“Nuestro propósito es concientizar sobre la necesidad de preservar los recursos naturales y reutilizar los descartes de materiales y objetos ya existentes. Se trata de revalorizar los oficios y las tradiciones locales y regionales, entre otras cuestiones que hacen a la sostenibilidad”, afirma. Para ello desarrollan proyectos, talleres, seminarios, charlas y eventos, además de acciones e intervenciones en la vía pública.
El desarrollo de sus piezas se hace bajo el concepto de que lo exclusivo y original es lo que prevalece para cada diseño. Cada pieza es única. “Creamos productos de diseño, que transforman el mundo en un lugar mejor”, sostiene.
Otros mercados
La firma actualmente exporta a Uruguay y Colombia y a principios de octubre participó del showroom de la Moda en Uruguay, a través de una misión comercial organizada por la Federación del Comercio e Industria de la Ciudad de Buenos Aires (Fecoba), con el apoyo de la Agencia de Promoción de Inversiones y Comercio Exterior de la Ciudad de Buenos Aires (InvestBA).
El secretario de comercio exterior de Fecoba, Martín Picón, uno de los organizadores del evento, mencionó que “la historia de la industria de la moda pasa por varios hitos, disímiles pero unidos por el desarrollo de una industria creativa”
De cara al futuro, la firma a finales de octubre participará en la Amazonia Fashion Week y además le entregarán la llave de la ciudad. La idea es internacionalizar la marca en América. “Cada retazo de tela que conforma esa pieza representa el trabajo de cada uno de los socios y el espíritu de la asociación, que insiste en la idea de unir y, por qué no, reparar y proteger. Sentí que esta era mi misión”, finaliza.
Tomado: La Nación